Telefónica, la empresa de telecomunicaciones de España, está recortando unos 2.700 puestos de trabajo en España. Se ha llegado a un acuerdo con los sindicatos al respecto. Se trata principalmente de los despidos voluntarios de empleados mayores. Los despidos son parte del plan más amplio del grupo para reducir costos.
Los empleados de 55 años o más el próximo año con un contrato de trabajo de más de 15 años pueden irse con un arreglo pronto. Telefónica pretende ahorrar 30.230 millones al año de forma estructural para 2030. El coste de la ronda de despidos se estima en 1.500 millones de euros. Esta cantidad se registrará en los libros como gastos en el cuarto trimestre de este año.
Esta es la tercera vez en cinco años que un grupo de telecomunicaciones interviene a sus propios empleados. Entre 2016 y 2018, cerca de 6.300 empleados fueron despedidos durante la primera reestructuración. En 2019, se agradeció a otros 2.600 empleados a través de un programa.
Telefónica cuenta actualmente con unos 18.500 empleados. Desde que el Grupo José María Álvarez-Ballet asumió el control en 2016, se han realizado importantes esfuerzos para reducir costos. Sus políticas, entre otras cosas, ahora han reducido a la mitad la deuda a unos 25.000 millones de euros.